25 de febrero de 2010

LOS SADDHUS

Los saddhus son los que se entregan a la verdad, siendo ésta la razón de su existencia, y nosotros los reconocemos como monjes, es decir, personas entregadas a investigar la verdad y adquirir el conocimiento, especialistas en el vidya, en la parte doctrinal del conocimiento y en su práctica vivencial. Y es que la tecnología del conocimiento es Upadesha más Upaya, es decir, teoría más práctica. Enseñanzas del muy venerable Swami Shankaratilakananda, discípulo de Swami Tilak (editado por Dipanjali Upasaki)

SWAMI SIVANANDA

Swami Sivananda además de curar a los peregrinos, les daba el donativo de su trabajo, lo que entregaban los seglares. Los que pierden muchas veces el corazón del pecho y lo llevan al monedero, son por tanto, sordos a las necesidades y ciegos ante las carencias. Y así, sólo abrían el monedero cuando existía un interés por medio, una necesidad de enseñanza, de consejo, de aprecio. Swamiji les daba salud e ideología cuando enfermaban, cuando los negocios no iban bien o enviudaban, porque era entonces cuando recurrían a los que están firmes como montañas, firmes en su meditación y su dharma, dispuestos a recibirles aunque los hayan ignorado durante mucho tiempo, porque las montañas siempre están ahí, y los saddhus y los monjes permanecen. Enseñanzas del muy venerable Swami Shankaratilakananda, discípulo de Swami Tilak (editado por Dipanjali Upasaki)

MAHATMA GANDHI

Hay que estar entrenado para cualquier momento, y practicar la meditación y el autocontrol diario, evitando los chismes y la contaminación de la mente. El fanático que mató a Mahatma Gandhi pensó que hacía un bien, porque Gandhi entregaba la India, esclavizando la dharma de nuevo al Islam. Pensó que era de por sí, un ser maligno, manifestado como tal. Pero en su última expresión, ante la muerte, sólo dijo: Rama, Rama.. Y esto hizo que el asesino se suicidara en la cárcel, no soportando su error, y la muerte de un Mahatma, de una gran alma. Enseñanzas del muy venerable Swami Shankaratilakananda, discípulo de Swami Tilak (editado por Dipanjali Upasaki)

NADA ES PERMANENTE

Ser ecuánime. No alegrarse ni por los vivos ni por los muertos, mantener un grado de ecuanimidad, ni mucha alegría, ni muy triste, porque cuando viene el problema la caída será tan alta como la euforia vivida. Hasta los césares cuando eran laureados en sus cuádrigas, les decían al oído “recuerda que eres mortal”, porque nada es permanente. Hablamos con esta serenidad y claridad, porque dice en los Upanishad “tú no eres el cuerpo, nada es permanente”, y así enseñamos la fortaleza a quien debe recibirla. La respuesta es mantener sama, la calma. Si algo puede solucionarse será desde la serenidad; si se pierden los nervios, no se encuentrarán soluciones o se complicarán. Enseñanzas del muy venerable Swami Shankaratilakananda, discípulo de Swami Tilak (editado por Dipanjali Upasaki) http://yogaydharmamadrid.blogspot.com

10 de febrero de 2010

EL EQUIPAJE DEL YATRA

En el mandiram (templo), la mente se vuelve fuerte, se fortalece. Así, el templo también es un tirtha, un lugar sagrado donde compactar más fuerzas espirituales, que se convierten en fuerzas físicas o psíquicas. Estar con un maestro y aprender con él, también es estar con un tirtha. Aprender con él, es lo que da origen al yatra, al viaje; antiguamente, cuando eran candidatos buscaban a los maestros en los bosques, en las montañas. Se encontraban con ellos y vencían todas las dificultades, porque el viaje era de por sí una prueba iniciática, y se ganaban el derecho a la pregunta. Dice el Bhagavad Gita que te ganarás el derecho de hacer la pregunta que suscita el conocimiento de aquellos que lo tienen, cuando ganes su amistad a través del respeto (pranam) y servicio, es decir, colabores en su misión y labor. Es el sistema tradicional védico, y así se ganaban las respuesta. ¿Cómo se hace la peregrinación? Se debe salir con la capacidad de poder aprender, como decía Swami Shivananda: adáptate, ajustáte y acomódate, que es la regla de saber poner el yoga en práctica. Aquel que quiere vivir cuando viaja como en casa, que todos los conceptos que conoce se repitan en los mundos donde va y en los mundos de las personas, no sabe viajar, al igual que aquel que quiere encontrar sólo lo que entiende. Por eso la mente ha de estar abierta, y el corazón también, sin prejuicios, ni ideas predeterminadas, que lo distinto no tiene porque ser malo, y no ha de asustarse por lo que no entiende, sino moderar sus emociones hasta que pueda comprender. Amabilidad y prudencia son dos recursos del peregrino: ser paciente, no ser hostil, desconfiar un poco como parte de la prudencia. Viaja con las ropas apropiadas, pero con un equipaje interno lo más vacío, para poder aprender lo que se le va a enseñar en su yatra. Enseñanzas de Swami Shankaratilakananda, discípulo de Swami Tilak (editado por Dipanjai Upasaki)

PEREGRINAR

Peregrinar, el yatra, es un propósito de crecimiento, un medio para crecer y expandirse. “Yana es vehículo y “tra” es expansión. Es en sí mismo el objetivo, tanto o más que el beneficio que se obtiene al llegar al lugar. Al hablar de peregrinación, hablamos de un lugar sagrado. En Dharma se dice que uno peregrina hacia un TIRTHA, aquel lugar donde los hombres han hecho satsangha, una comunidad con lo divino para invocar la verdad, han enseñado sobre la verdad, y esta ha descendido sobre ellos, de ahí satsangha. Y el lugar se convierte en un tirtha, aunque los hombres que convocaron la verdad ya no estén, porque la enseñanza no sólo queda en la memoria de quienes aprenden, sino en la vibración del lugar, es la sattva guna shakti, en forma pura y equilibrada. El lugar invoca de por sí a la trascendencia y elevación, no siendo lo mismo meditar en un tirtha que en otro lugar. Así, los tirthas han sido legados por los antiguos maestros, y siguen legándose por los modernos maestros que hacen de un lugar corriente, uno sagrado, porque ahí se enseña dharma. Cuanto más tiempo lleva ese lugar impregnándose no sólo de las fuerzas espirituales de los hombres del pasado, sino de los del presente que siguen depositando la vibración espiritual, ese tirtha es cada vez más poderoso. Es importante al peregrinar que el tiempo atmosférico no sea inconveniente. El cuerpo ha de estar en equilibrio con la naturaleza, por eso en la antigua India, en la época del monzón no era aconsejable el yatra, no es técnicamente buen momento. También en esa época se dice que los dioses están dormidos por la chaturmasya, porque la tradición lunar védica es distinta a la tradición solar occidental. El mejor momento es a partir de septiembre, aceptable de calor pero sin humedad, sin tantas posibilidades de infecciones; dependiendo de qué lugar, enero o febrero son buenos meses en el Norte, marzo maravilloso, abril ya empieza el calor, y después excesivo calor. ¿Internamente cuál es el momento? Cuando hay la necesidad de salir del conflicto interno, del aire viciado, donde se ha de solucionar no solo lo propio, sino que necesita la ayuda externa.

3 de diciembre de 2009

EL ARTE DE VIVIR EN ARMONÍA 4

POR: SWAMI SHANKARATILAKANANDA http://yogaydharmamadrid.blogspot.com (…) Aceptamos, pero con conocimiento de las cosas, y viviendo nuestro dharma. Pero si no sé cuál es la vida que tengo qué vivir, nadie me enseñó, ni transmitió, tendré esa insatisfacción, no tendré ananda. Hay personas que tienen en su dharma, el descubrir el conocimiento de cómo se tiene que vivir, vivirlo, convertirse en buscadores de la verdad, pero también en compartirlo con otros. Quieren expresar el amor que genera la libertad, el no estar mentalmente coaccionados por las personas, animales y cosas, sino que tienen la libertad de haber encontrado ananda dentro de ellos, dentro del moksha, de la liberación de la no dependencia. Pueden tenerlo o no, estar con todos o no, que le amen o no, salud o no, pero tienen ananda, una bienaventuranza eterna, y una dicha que parte de que así son las cosas. Moksha es importante, es la liberación, aquello que parte no sólo de un conocimiento, sino que ha de ser vivencia. Lo que vives en tí, se convierte en tí, como parte de tí. No como la pizza que se repite, porque entonces no soy una, sino que sigue siendo pizza en el intestino. Y si ésta deja de ser pimiento y es nutriente, es cuando eres uno con la pizza. Y así eres uno con cada cosa del universo, cuando lo haces a través de tu conocimiento; cuando tu yoidad, tu presencia significativa, te repites al universo, con regurgitados de ti: el universo te acerca, te machaca. Así cuando no estás en propia armonía con la existencia, te equilibra: se enfrenta para armonizarte. Porque has de ser nutriente positivo de la existencia.